Cuando parecía que la celebración del Festival de Eurovisión 2017 seguía su ritmo y los preparativos estaban ya bastante avanzados, diversos medios ucranianos ponen en cuestión la capacidad de la televisión ucraniana NTU y la ciudad de Kiev para acoger y organizar la próxima edición del certamen europeo.
Aunque es muy improbable que la UER tome la decisión de llevar el festival a otro país, si es cierto que los preparativos no están yendo de la forma prevista. Alexander Hrebin, director general de la NTU, ha admitido a la prensa local que la UER dio una llamada de atención a la televisión ucraniana en el mes de octubre. La legislación de Ucrania y la falta de financiación del gobierno parecen haber contribuido a estos retrasos, lo que dio lugar hace semanas a la dimisión de Zurab Alasania como director general de la NTU. Tras su renuncia, fue el ministro de cultura quien tomó las riendas de todo este proceso. Por si fuera poco, el Centro Internacional de Exposiciones, sede de Eurovisión 2017, aún no ha firmado el contrato para la celebración del evento.
Estos mismos medios afirman que la UER tomará una decisión final el próximo 8 de diciembre durante su asamblea anual. A todo esto se suma también la cantidad de problemas que está habiendo en las páginas de reservas con los alojamientos, desde cancelaciones anticipadas u hoteles que piden el pago completo de la estancia por adelantado saltándose las condiciones de reserva.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, sin embargo ha asegurado a los fans que la ciudad estará lista a tiempo y la renovada plaza Poshtova abrirá a tiempo como una de las principales zonas para fans. En declaraciones a Radio Liberty, también confirmó que se lanzará un autobús acuático que realizará la ruta desde la Estación del Río hasta el Centro Internacional de Exposiciones. 600 oficiales de la Patrulla Metropolitana también participarán en cursos de inglés antes de mayo de 2017, con el fin de poder ofrecer un mejor servicio a todos los fans y visitantes.
