Era el 24 de mayo de 1956 cuando una jovencísima Lys Assia alzaba el primer micrófono de oro de la historia. A sus 30 años recién cumplidos, la cantante ya era todo un icono de la canción en su Suiza natal y justo en ese momento se aventuraba a la ardua tarea de representar a su patria en la primera edición del Festival de Eurovisión. Poco imaginaba aquella joven artista que pasaría a la historia como la primera vencedora de un certamen que es todo un movimiento de masas y que sirve de estilo de vida para mucha gente al haberse convertido a lo largo de seis décadas en el mayor y más longevo espectáculo del mundo.
https://www.youtube.com/watch?v=IyqIPvOkiRk
En los años 50, la UER (Unión europea de Radiodifusión) con base en Suiza, puso en marcha la idea de un festival de la canción internacional donde todos los países pudieran participar en un programa de televisión que sería trasmitido simultáneamente en todos los países de la UER. Esto fue concebido durante una reunión en Mónaco en 1955 por Marcel Bezençon, presidente de la UER en ese momento. La competencia se basó en el italiano Festival de San Remo y fue visto como un experimento tecnológico para la televisión en vivo, pues en esos días una transmisión simultánea a varios países era un proyecto muy ambicioso.
La primera edición del Festival de Eurovisión se celebró en la ciudad de Lugano (Suiza). Siete países participaron presentando dos canciones cada uno, dando un total de catorce canciones. Ésta fue la única edición donde un país podía interpretar más de una canción (desde 1957 todas las competiciones permitieron sólo una canción por país). La competición de 1956 fue ganada por el país anfitrión: Suiza.
El programa fue primeramente conocido como el «Eurovision Grand Prix». El nombre de «Grand Prix» fue adoptado por los países francófonos, así como por Dinamarca y Noruega, donde la competición pasó a ser conocida como «Le Grand-Prix Eurovision de la Chanson Européenne«. Las palabras «Grand Prix» se dejaron de usar desde entonces y fueron remplazadas por «Concours» (competición). La Unión Europea de Radiodifusión se utiliza también para transmitir noticias y programas de deportes internacionalmente, así como otros eventos especiales. Sin embargo, el Festival de la Canción ha tenido mucho más relevancia que estos programas y con el tiempo se ha convertido en sinónimo con el nombre de «Eurovisión».
El formato de las presentaciones ha sufrido cambios a lo largo de los años, aunque los principios básicos han sido siempre los mismos: los países participantes presentan sus canciones, que se transmiten en vivo en un programa de televisión que es emitido simultáneamente en todos los países participantes. Este programa lo prepara en exclusiva uno de los países participantes (el país organizador) y la transmisión se envía desde el auditorio de la ciudad donde se realiza el evento. Durante este programa, después de interpretarse todas las canciones, los países proceden a votar por las canciones que a su juicio son las mejores, sin poder votar por sí mismos. Al final del programa, la canción con más puntos se declara vencedora.
Por lo general, el programa se inicia con el ganador del año anterior, quien suele interpretar la canción (o una pequeña variante) con la que ganó, y a veces su nuevo single. En los años en que había orquesta, ésta interpretaba una composición especialmente creada para el evento mientras generalmente se veían en pantalla imágenes del país anfitrión. Posteriormente, los presentadores dan la bienvenida a los telespectadores al espectáculo mezclando idiomas, siempre en inglés y francés, frecuentemente en el idioma anfitrión y en algunas ocasiones utilizando varios o todos los idiomas de los países participantes. Muchos de los países anfitriones aprovechan la gran audiencia internacional que tienen estos programas para mostrar escenas de su nación como forma de promover el turismo.
La música de la cortinilla que se escucha antes y después de las transmisiones del Festival de la Canción de Eurovisión es el preludio de «Te Deum» de Marc-Antoine Charpentier.
Tradicionalmente, y desde 1963, la final del Festival de la Canción de Eurovisión se lleva a cabo un sábado primaveral por la noche, a las 19:00 (hora UTC). En años anteriores, el festival se ha celebrado en días de la semana variados, como un jueves en 1960 o un domingo en 1962, entre otros. Desde 2004, debido al creciente número de países que decidieron participar, una ronda clasificatoria -conocida como la semifinal- se llevó a cabo el jueves antes de la final (en 2004 fue concretamente el miércoles anterior a la final). Con el aumento de las radiodifusoras participantes, desde 2008 se celebran dos semifinales en la misma semana, las semifinales en martes y jueves, y la final en sábado.
Los países aptos para participar son los miembros activos de la Unión Europea de Radiodifusión. Los miembros activos son aquellos países que estén dentro del Área de Radiodifusión Europea (que incluye países que no son europeos) o los que pertenecen al Consejo de Europa, siempre que hayan solicitado su ingreso en la UER y cumplan con todos los requisitos para permanecer como miembros activo.
Desde sus comienzos, Eurovisión ha sido un escaparate internacional de artistas noveles y consagrados, por donde han pasado nombres de la talla de: Nana Mouskouri, Raphael, Cliff Richard, Julio Iglesias, Olivia Newton John, Abba, Al Bano y Romina Power, Paloma San Basilio, Celine Dion, Lara Fabian, Azúcar Moreno, Sergio Dalma, Dulce Pontes, Noa, Engelbert Humperdinck, Bonnie Tyler o Anouk por citar a algunos.
A continuación, para celebrar este día tan especial, os dejamos con este vídeo que recoge a todos los ganadores de la historia de Eurovisión desde 1956, con Lys Assia por Suiza y su dulce «Refrain», hasta 2016 con la reciente y flamante ganadora Jamala, por Ucrania con su reivindicativo «1944».
https://www.youtube.com/watch?v=qSsKZax6pa4