Vivió en primerísima persona uno de los festivales que con más cariño recordamos los españoles. En 2002, TVE revolucionaba el país gracias a Operación Triunfo, el programa musical que se convirtió en un auténtico fenómeno social y que serviría por tres años consecutivos como preselección eurovisiva. Hasta Tallín (Estonia) viajaría nuestra Rosa de España viviendo el cuento de una Cenicienta moderna que pasaba de ser un patito feo a una estrella internacional y removedora de masas en tan sólo unos meses. Mientras nuestro país se volcaba en la ilusión por recuperar el pedestal que en sus mejores tiempos sujetaba a nuestro querido certamen, otros países hacían lo propio por apoyar a sus representantes para que se llevasen el festival a casa… Y a punto estuvo de conseguirlo la entrevistada que hoy nos ocupa. Ira Losco es una afamada cantante maltesa que consiguió un hueco en la música a muy temprana edad, liderando el grupo infantil Tiara. Años más tarde, en ese 2002, sería elegida en solitario para representar a su país en Eurovisión y casi llegó a ser la primera ganadora por Malta (país que aún no ostenta ninguna victoria en el citado festival). Tras su segundo puesto en Estonia, la intérprete comenzó a gestar una carrera discográfica como solista plagada de éxitos que le ha llevado a pisar escenarios del mundo entero. Para hablarnos de sus recuerdos eurovisivos más apasionantes y del momento musical que vive, Ira nos concede esta entrevista:
- Hola, Ira. ¡Qué ilusión poder dirigirnos a ti! Lo primero que queremos saber es qué recuerdos conservas de tu experiencia eurovisiva.
Obviamente, guardo muy buenos recuerdos. Fue la vez que mi país más cerca estuvo de ganar. Me faltaron sólo unos puntitos para llevármelo. Y me hizo una especial ilusión porque no fue un resultado esperado. Yo no partía de favorita ni para la prensa ni para los eurofans. De hecho, fue tal la sorpresa, que aún hoy me llaman el «Black Horse» de aquel año. Mira, ¡para los que se creían que Malta nunca tendría posibilidades!
- Eso es. Conseguiste la segunda posición y ganó Letonia… ¿Qué te pareció la canción vencedora de aquel año?
Me pareció inevitable. El pop latino estaba muy de moda en esos años. La canción letona tenía mucho enganche. Podía sonar en cualquier lista de la radiofórmula porque era comercial y atractiva. Y también es un hecho innegable que Marie N supo conquistar a la audiencia con su coreografía y esos grandes trucos de vestuario. Letonia se aseguró el triunfo. Se lo propuso y lo consiguió.
- Malta es un país que todavía no ha conseguido nunca una victoria eurovisiva. ¿Qué habría que hacer para cambiar eso?
No sé. No hay una receta para ganar el Festival de Eurovisión. Eso sí, hay que aprovechar el cambio de tuerca que ha dado el certamen. Ahora es mucho más fresco, engloba mucha diversidad musical y suelen participar estrellas consolidadas y de éxito en muchos países, lo que atrae a un sector de la audiencia que antes no reparaba en el concurso o no prestaba suficiente atención. Es decir, hoy en día, los seguidores de las listas internacionales de éxito están pendientes de Eurovisión porque es un escaparate de hits. ¡Pues en ellos está la clave! Hay que hacer que esos fans, que no precisamente tienen por qué ser eurofans, degusten antes que nadie las canciones que se presenten. Hace falta más promoción previa al festival (y lo digo por Malta y por más países). Las redes sociales hoy mandan y hay que hacer mucho movimiento para que el público antes del festival ya conozca y valore la canción. El primer acercamiento debe ser la promoción, agarrándose al tirón de la radiofórmula y las redes sociales. Después, el artista no debe defraudar en directo. Hay que montar un buen show visual que adorne y venda bien la canción (para eso se emite por televisión)… Y, de esta forma, el público, tras los tres minutos de actuación cerrará el trato.
- Este año, Malta no pasó a la final. ¿Qué opinas de Amber y de «Warrior»?
La consideré una gran competidora. Era una apuesta fuerte por parte de Malta, tanto por canción como por intérprete. La preselección maltesa de 2015 estaba llena de temazos y de grandes artistas. Cualquiera habría hecho un excelente papel. Le tocó a Amber y creo que estuvo a la altura. Le vi en todo momento muy segura de sí misma.
- Nos vamos a Estocolmo el año que viene debido a que Mans Zelmerlow se llevó el premio para Suecia. ¿Te gusta «Heroes»?
¡Me apasiona! Se parece muchísimo a otro tema que me encanta, «Lovers On The Sun» de David Guetta; pero aun así, Mans hizo una actuación brillante. Es un gran artista y contó con una realización superior. En cuanto lo vi, supe que ganaría.
- Muchos eurofans te ven como «la esperanza maltesa». Creen que eres la única que podría ganar por tu país. ¿No te has planteado nunca volver a Eurovisión?
Siempre respondo que «nunca digo nunca». A mí me dan vida los escenarios, la música, mis fans… Sé que voy a seguir en esto. Eurovisión me dio muchas cosas, así que no descarto volver a participar. El día en que tenga una canción que considere ganadora del festival, tened por seguro que me veréis en la preselección maltesa.
- Si te pregunto por la mejor actuación de Malta en Eurovisión…
Siempre se me viene a la cabeza Gianluca con «Tomorrow», octava posición en 2013. Su sencillez y su carisma le hicieron destacar. Su canción era fácil pero bonita. Y las cosas bien hechas gustan. Por cierto, a mí me gustó mucho cantar con él hace un año.
- Como seguidora habitual de Eurovisión que eres, seguro que hay alguna canción de España que no puedes quitarte de la cabeza…
¡Y tanto! Sin ir más lejos, «Amanecer» de Edurne. Quedé impactada con esa actuación este año. Edurne demostró ser una artista de nivel. Ella es impresionante. Y, bueno, no olvido a la encantadora Rosa, que fue compañera mía en 2002. Me pareció una chica adorable, con una voz de esas que se clavan. Mereció mucho más en nuestro año. Un séptimo puesto me pareció poco. Sinceramente, fue una de las mejores actuaciones de la noche. Lo recuerdo como si fuera ahora mismo…
- ¿Y qué es de tu carrera actual?
Pues, mira, me pillas en el estudio de grabación. Te estoy respondiendo desde aquí. Estoy grabando un nuevo disco, el séptimo ya en solitario. Saldrá a comienzos de 2016. Mi último trabajo, editado en 2014, se tituló «The Fire» y ha sido un éxito. Estoy muy contenta con las ventas y las críticas. Los eurofans siguen consumiendo mi música y también me arropan otros tipos de público, así que no puedo quejarme. Elegí una profesión sacrificada pero que da muchas satisfacciones. Repartir música por el mundo te da una sensación maravillosa.
- Acostumbramos siempre que, al despedirnos, sea el artista entrevistado quien se dirija a los eurofans de OGAE Spain… ¿Cómo cerrarías esta entrevista?
Inmensamente agradecida por que hayáis contado conmigo para este rato tan especial. Los eurofans españoles siempre han mostrado cariño e interés por mi música. ¡Gracias por tanto apoyo! Si vuelvo a Eurovisión, seréis los primeros en saberlo. Además, sé que contaría con vuestros votos. Os amo. Muchos besos.