La construcción del escenario de Eurovisión 2019 se detuvo el pasado domingo a causa del reciente anuncio del Ministerio de Seguridad Pública, que determinaba que la policía cesara su trabajo de revisión y supervisión de todo el equipamiento del festival. La razón de este anuncio se debe a la falta de transferencia de un presupuesto de seguridad por parte de los diversos ministerios del gobierno.
Tras la suspensión del trabajo, el supervisor ejecutivo de Eurovisión, Jon Ola Sand, envió una carta urgente al Primer Ministro:
«La imagen del Estado de Israel está siendo violada. Hay un daño de medio millón de shekels por día de los fondos públicos como resultado de la demora provocada por el anuncio del Ministerio de Seguridad Pública, donde cesa el trabajo policial para inspeccionar el equipo y los trabajos de construcción en el Pabellón 2. Los costes aumentarán cada dos días debido a la suma de gastos adicionales al proyecto».
«En la actualidad, hay dos empresas extranjeras con mano de obra y equipo en el estadio, y ahora hemos entrado en una demora de 24 horas que causa muchos cambios. A continuación se detallan los daños financieros que la demora puede causar: costes de espera de contenedores, mano de obra: se agregaron días de trabajo adicionales a los días planificados y calculados en el presupuesto anticipado, cambios en las fechas de los vuelos y el alojamiento. Los vuelos y el alojamiento se han determinado con anticipación, y cualquier cambio conlleva costes adicionales, tiempos de llegada y descarga de contenedores cambiados, y costes de personal en el desmontaje y montaje, etc.».
Un nuevo retraso en la inspección policial del equipo pone en peligro la celebración de Eurovisión en Tel Aviv.
Frank-Dieter Freiling, presidente del grupo de referencia de Eurovisión, también ha enviado una carta al Primer Ministro:
«Ya es bastante alarmante que en los últimos meses haya habido discusiones sobre quién paga qué por las medidas de seguridad en torno al Festival de Eurovisión. Ayer nos enteramos de que la policía israelí había recibido instrucciones de no hacer su trabajo (llamada «rutina de búsqueda de bombas K9″) en la sede de Eurovisión».
«La UER respalda totalmente la declaración de la televisión pública (KAN) emitida ayer, en la que afirma que el trabajo no se podrá reanudar sin que se lleve a cabo la búsqueda de bombas K9. Sin no se produce un cambio de inmediato, los retrasos causados por la ausencia de esta medida de seguridad esencial tendrán consecuencias negativas e importantes en «la capacidad de celebrar los ensayos a tiempo y, por lo tanto, en el presupuesto y en la calidad de los programas que se emitirán desde Tel Aviv».
«Además, la UER tendrá que informar a las 41 delegaciones de esta situación. Como puede suponer, en vista de los eventos recientes en Tel Aviv, este ya es un tema delicado para las delegaciones. Esta nueva información solo generará más preocupaciones y preguntas sobre la idoneidad de las medidas de seguridad y protección implementadas en Israel para el Festival de Eurovisión».
A continuación podemos ver un vídeo del recinto, donde la productora del concurso, Zivit Davidovitch, afirma sentirse avergonzada de su país. «El pabellón de Eurovisión, vacío debido a la huelga policial contra el evento».