REGINA

Regina, cuyo nombre real es Irena Kogoy, representó a Eslovenia en Eurovisión 1996, y desde entonces, ha formado parte de la preselección del pequeño estado en numerosas ocasiones. Este año, celebrando el 20º aniversario de su primera participación en Eurovisión, tratará de defender nuevamente a su país, ya que el próximo sábado 27 de febrero interpretará una de las diez canciones candidatas en el EMA 2016.

La carrera de Irena comenzó formando parte del “Duo Regina” a principios de los años ochenta. En 1988, participó por primera vez en el famoso festival “Pop Delavnica”, donde interpretó la canción “Vem”, que le ayudó a publicar su primer disco en solitario.

En 1990 tuvo lugar su primera incursión dentro del mundo eurovisivo, ya que trató de participar en la preselección yugoslava de aquel año, aunque su canción no fue finalmente seleccionada. Tras la independencia de Eslovenia en 1993, Regina formó parte de la preselección del pequeño país y con su canción “Naj Ljubezen Zdruzi Vse Ljudi”, obtuvo la cuarta posición en el concurso. Tres años más tarde, Regina tuvo la oportunidad de representara a Eslovenia en el festival de Eurovisión, ya que ganó la selección nacional de Eslovenia con su canción “Dan Najlepših Sanj” (El día de los más bellos sueños). En Eurovisión obtuvo la vigésimo primera posición.

Tras su experiencia en el festival, Regina trató de representar a Eslovenia en cinco ocasiones más, formando parte de las distintas selecciones del país: en 1998 finalizó 3ª con «Glasgora»; en 2001 obtuvo la 8ª posición con “Zaljubljena V Maj”; en 2002 se conformó con quedarse en semifinales con la canción “Ljubezen Daje Moč»; en 2004 trató de representar a Eslovenia con la canción “Plaveočij” obteniendo la 10ª posición; y finalmente en 2005 participó en la preselección eslovena con la canción “Protivetru” con la que obtuvo la 9ª posición. Sin embargo, en esta última ocasión, su canción fue la máxima favorita del jurado nacional.

Desde 2005 su carrera musical no ha parado y este año tratará de representar a Eslovenia en Eurovisión, celebrando así el vigésimo aniversario de su primera participación en el festival.

• ¡Hola Regina! Es un gran honor tenerte con nosotros. La mayor parte de los seguidores de Eurovisión te conocen desde 1996 debido a tu participación en el festival de aquel año, pero tu carrera musical había comenzado muchos años antes. ¿Podrías hablarnos de tu inicio en la industria de la música? ¿Cuándo te convertiste en una cantante profesional? ¿Cuántos discos has publicado?

Es difícil decir cuándo comenzó todo o incluso si tuvo un comienzo en sí. Todo lo que puedo decir es que la música es y siempre ha sido una gran parte de mi vida. No sólo cuando canto, sino en todos los sentidos de su existencia. Siempre ha tenido una influencia en mí, en mi forma de ser y en mi estado de ánimo. Cuando no canto, bailo, y cuando no bailo tan sólo le dejo que me lleve a su propio mundo. La música me ha ayudado durante todos los cambios de mi vida, me ayudó a sentirme viva, y aún lo hace.

El Festival de Eurovisión también ha sido parte de mi vida desde mis primeros recuerdos de niña. Desde pequeña, siempre soñé en subir a aquel escenario, y para ser sincera, todavía no comprendo como aquel sueño se pudo convertir en realidad.

Con respecto al número de discos que he publicado, las estadísticas y los números nunca han sido mi fuerte, ya que a mi modo de ver, los números son sólo números y no dicen mucho más. Si estoy en lo cierto, tengo diez discos en solitario y muchas colaboraciones con otros artistas, tantas que no sé cuántas en realidad.

• ¿Cuáles son tus influencias musicales?

Emociones. Todo lo que siento, lo quiero plasmar a través de mi música, por lo que no podría centrarme en un solo género musical. Mi carrera ha estado dirigida por una continua transformación, yendo desde un género a otro. Como artista aprecio verdaderamente los nuevos estilos musicales, por lo que no es una coincidencia que hace tres años formara parte de las listas de éxitos de EDM con mi canción «Ritem Ulice» (El ritmo de la calle), con la que tuve un gran reconocimiento en Eslovenia y de la cual me siento muy orgullosa.

• ¿Cómo te describirías como artista?

No pensé que las preguntas serían tan complicadas 🙂 . Es difícil describirse a uno mismo, aunque si tuviera que decir el rasgo que más me caracteriza sería la honestidad en mi música. No uso la música con el fin de ganar dinero, de hecho me muevo muy mal dentro del mundo financiero. Mi único deseo es el de llegar a la gente, y de conectar con mi público y entregarles algo de mí.

• En 1996 fuiste seleccionada para representar a tu país en el Festival de Eurovisión, pero antes de acudir a Oslo, tu canción tuvo que pasar una semifinal interna (audio solamente), ya que un gran número de países querían participar en Eurovisión aquel año, y tan sólo habían 22 plazas. Finalmente tu canción pasó el corte y pudiste acudir a Noruega. ¿Cómo recuerdas esta fase de clasificación previa?

Fue muy emocionante y por su puesto muy estresante. Aunque estaba feliz por el hecho de haber ganado la preselección en mi país, mi felicidad no era completa, ya que no estaba segura de si mi sueño de juventud, formar parte de Eurovisión, se haría realidad. Realmente fueron semanas de mucho estrés.

Recuerdo que estaba en el backstage preparando mi actuación para la gala de los Viktorji, unos de los premios más importantes en la industria de la música en mi país, cuando de repente recibí una llamada telefónica informándome de que mi canción “Dan Najlepših Sanj” (El día de los más bellos sueños) se encontraba entre los finalistas para el festival de Eurovisión. Justo antes de salir a escena, el presentador de la gala comunicó mi clasificación, y realmente aquel momento se convirtió en uno de los días de los más bellos sueños (Dan Najlepših Sanj).

• ¿Cómo fue tu experiencia en Eurovisión 1996? Estabas embarazada… por lo que seguro que tendrás alguna anécdota.

Sí, realmante tengo varias. Mi hijo se encontraba creciendo dentro de mi barriguita, por lo que continuamente tenía que cambiar mi técnica a la hora de cantar. Se movía muy a menudo, y cada vez que presionaba en mi diafragma, algo muy importante para los cantantes, mi voz sonaba de forma diferente.

Al parecer mi hijo se divertía mucho bebiéndose el líquido amniótico, lo que provocó que constantemente tuviera ataques de hipo. No te puedes ni imaginar lo difícil que es cantar y mantener una nota cuando alguien tiene hipo en tu interior. Afortunadamente, me respetó durante mi actuación en Oslo y estuvo en paz durante toda la gala.

• Tras la votación, tu canción se clasificó en vigésimo primera posición. ¿Cómo te sentiste con el resultado? ¿Te sentiste satisfecha con tu actuación en el festival?

Nunca estoy 100% satisfecha conmigo misma. Siempre quiero hacer algún tipo de mejora pero mi actuación estuvo bien y al nivel de la gala, por lo que sí, me sentí contenta considerando las circunstancias. Aunque también he de admitir que estaba completamente exhausta. Dos cosas importantes me estaban sucediendo en el mismo momento: formar parte del Festival de Eurovisión y la maternidad. Hoy día, me doy cuenta que no pude disfrutar de ninguna de ellas como me hubiera gustado.

Mi embarazo estaba muy avanzado por lo que no pude llevar el vestido que me hubiera gustado y no pude hacer mucho sobre el escenario. Es muy bonito estar embarazada, pero no es la mejor combinación (visual y física) con la actuación sobre un escenario.

Los resultados me entristecieron mucho. Tal vez esa sea la parte que más me gustaría olvidar. Es duro ver que la música que te toca, te llega y te despierta es valorada y medida en menor escala que las canciones que te rodean. Eurovisión debería ser un concurso no competitivo, en el que las canciones de Europa se presentaran y cada uno de nosotros pudiera elegir su propia favorita, sin necesidad de elegir un ganador.

Por otro lado, me reconfortó el recibimiento de la gente en mi país, que siempre creyó en mi canción y que todavía lo hace, por lo que “Dan Najlepših Sanj” se ha convertido en un clásico de la música eslovena. Al mismo tiempo, la canción que presenté en la preselección de 1993, “Naj Ljubezen Zdruzi Vse Ljudi” es considerada hoy día una canción tradicional folk de mi país. Ha sido cantada por muchas generaciones, y es enseñada en las guarderías de mi país. Por todo esto, mi experiencia mereció mucho la pena, aunque finalizase en una desafortunada vigésimo primera posición. Pero otra vez, tan sólo es un número, nada más.

• Desde tu participación en Oslo, has tratado de representar a Eslovenia en cinco ocasiones, y este año participarás nuevamente en el EMA. Será tu octavo intento. ¿Qué es para ti Eurovisión?

Como he mencionado anteriormente, participar en el festival siempre fue un sueño de juventud, que posteriormente se convirtió en realidad. En la actualidad, muchas cosas las veo de forma diferente, pero Eurovisión es todavía un sueño para mí.

He participado tantas veces en la preselección porque es una buena forma de presentar algo en lo que crees a un público muy amplio. Para mí, mis canciones son como hijos. Siempre me aseguro de esforzarme al máximo con el fin de sorprender con algo nuevo. Mi aspecto es siempre diferente. Fui la primera en competir en la selección nacional con una canción tan patriótica como “Glasgora” (La voz de las montañas) (1998) e igualmente fui la primera en cantar en un dialecto de la región de Prekmurje en 2004 con la canción “Plaveočij”.

• En EMA 2016 participarás con tu canción “Alive In Everyway”. ¿Podrías hablarnos acerca de ella?

El mensaje principal de la canción es que las personas vivimos la mayor parte del tiempo dentro de una caja imaginaria que nos impide ver y aceptar la belleza del mundo que nos rodea. ¿Alguna vez has contemplado un atardecer mientras ibas de camino del trabajo a casa? O ¿miraste unas montañas en el horizonte y decidiste en ese momento de visitarlas al día siguiente?… Con esto quiero hacer ver a la gente que deben abrir los ojos y aceptar algo más que la monotonía. Olvidémonos de quienes somos, que edad tenemos, de dónde venimos… Vivamos.

La canción es muy actual, y vocalmente, nunca me había sentido tan cómoda como con esta canción. Con ella siento que realmente soy yo y creo que puedo transmitirlo. Además es una canción con una fuerte carga emocional y una extrema positividad. La combinación de guitarras acústicas y sintetizadores la hacen muy interesante y fresca. (Minuto 3:15)

• ¿Qué nos puedes decir de tu puesta en escena para la gala final del EMA 2016?

No puedo decíroslo, porque si lo hago, arruinaré la sorpresa. Las mujeres solemos ser muy interesantes y no solemos mostrar todas nuestras cartas de primeras… ¿O sí?

• Eslovenia participó por primera vez en Eurovisión en 1993. ¿Cuál es tu canción favorita de Eslovenia en el festival (incluidas las canciones de Yugoslavia)? ¿Y de los demás países?

Mi canción eslovena favorita es “Dan Ljubezni”, que representó a Yugoslavia en 1975. No tengo ninguna canción favorita de otros países, pero puedo confirmar que hay una canción que realmente significa mucho para mí. Esta canción es la primera que recuerdo haber escuchado y también la primera que canté de pequeña. ¡¡Todavía tengo las grabaciones!! Era muy pequeña para cantar la letra de la canción, por lo que sólo la tarareaba. Se trata de “Puppet On A String” (Reino Unido 1967).

• Este es el momento de dedicar unas palabras a todos tus fans, lectores de nuestra página web, en España y otros países de habla hispana.

Toma un momento y olvídate de todo lo que sucede hoy a tu alrededor. Toma un fuerte soplo de aire y exhala todos tus miedos, ansiedades, prejuicios y ten el valor de estar vivo en todas sus formas. Espero que conectes y sientas mi canción.

¡Muchas gracias! Os quiero a todos!!!

¡Buena suerte Regina! ¡Esperamos verte en Estocolmo!