La cantante rusa Julia Samoylova, representante de su país en Eurovisión 2018, acudió ayer al programa «Pust’govoryat» de la televisión rusa Perviy Kanal. La intérprete hizo un repaso extenso de su carrera musical y se centró en su última experiencia artística: el Festival de Eurovisión.
En su país ha causado una gran conmoción la primera eliminación en semifinales de Rusia, algo que esta nación nunca había experimentado, pues siempre ha estado en la final de cada edición eurovisiva. Una de las preguntas del presentador hacia Julia fue acerca de la influencia del voto político o de los rumores entre amiguismos o vecinismos que siempre rodean al Festival. En su respuesta, la cantante fue tajante y honesta: «No fui consciente durante mi actuación de lo mal que lo estaba haciendo, por eso rompí a llorar al saber el resultado de la gala. Sin embargo, al revisar el vídeo me di cuenta de los muchos errores que tuve. Evidentemente, no fue mi mejor noche y considero justo que me quedase fuera de la final. Gracias a las personas que me apoyaron, que sé que fueron muchas, pero entiendo y acepto las consecuencias de haber cantado como canté debido a la emoción que me producía estar allí. No hubo nada de influjos políticos entre jurados o televidentes. Directamente, no creo en eso. Si ves mi actuación, está claro que no estuve a la altura y no pasa nada por reconocerlo. Es más, creo que se clasificaron en la final los países que mejor defensa tuvieron por parte de sus intérpretes. Así es como debe ser. Y, cuando uno no se clasifica, la culpa es de uno mismo. No hay que mirar hacia otro lado».
La cantante finalizó su intervención pidiendo disculpas a sus seguidores por su mala pasada en el Festival y confesando estar ilusionada con sus nuevos proyectos, en los que asegura que pondrá todo su esfuerzo e ilusión para que salgan bien. «Eurovisión, para bien o para mal, es un escaparate inmenso y pienso aprovecharlo al máximo», concluía mientras el público la arropaba con un cálido aplauso.