El pasado mes de agosto el Ministro de Cultura ucraniano, Eugene Nyschuk, publicó una lista de cantantes y actores rusos cuyo trabajo ha sido prohibido en radios, cines y televisión. El objetivo de esta censura es descartar amenazas a la seguridad de los ciudadanos ucranianos.
Tras la publicación de Kiev como ciudad anfitriona, Nyschuk ratificó que todo aquel artista incluido en la “lista negra” no podrá participar en Eurovisión al no poder pisar suelo ucraniano: “Si Rusia elige un artista de la lista, sería una clara provocación hacia nuestro país. En Rusia hay muchos artistas que entienden que la paz es lo más importante y que no se puede hablar el idioma de la agresión y menospreciar a algunos países, especialmente a los vecinos. Por tanto, es necesario hablar de una manera profesional – a través de la música y el canto.”
La “lista negra” incluye más de 80 personas, incluyendo cantantes como Oleg Gazmanov, Iosif Kobzon, Valery Joseph Prigogine, Mikhail Boyarsky, Grigory Leps y Nikolay Rastorguev (líder del grupo Lyube). Asimismo, el actor francés Gerard Depardieu se encuentra también en la lista tras convertirse en ciudadano ruso en 2013.
Tras la información de Eugene Nyschuk el pasado viernes, muchos de los artistas incluidos en la lista han sugerido la retirada de Rusia en el próximo Festival de Eurovisión.
Por su parte, Jon Ola Sand, productor ejecutivo de Eurovisión ha confirmado que la UER tratará de llegar a un acuerdo a través de un diálogo constructivo con las autoridades de Ucrania para asegurar que todas las delegaciones y artistas puedan formar parte de Eurovisión 2017
